Microsoft Word - Comunicar sin perspectivas2.doc Palabra Clave 79 Número 4 · 2001 COMUNICAR SIN PERSPECTIVAS, ¿PARA QUÉ? "La vida sólo puede entenderse mirando hacia atrás, pero ha de vivirse yendo hacia delante" Sören Kierkegaard Germán Ortiz Leiva Es Comunicador Social en la Universidad de La Sabana y Derecho Constitucional en la Universidad Extemado de Colombia. Es Magíster en Relaciones Internacionales de la Universidad Javeriana. Se ha especializado en asuntos de la agenda pública mundial. En la actualidad es el jefe del Área de Comunicación Pública de la Facultad de Comunicación de la Universidad de La Sabana. GERMÁN ORTIZ LEIVA Palabra Clave 80 Número 4 · 2001 l objetivo de este escrito es demostrar la necesidad de replantear las perspectivas desde las que se asumen muchos estudios de lo comunicacional sobre realidades concretas, para entender con más solidez y través de los medios masivos, los esquemas en el tratamiento diario de los hechos de violencia y terrorismo; valores y efectos en sus audiencias, las rutinas y sus consecuencias en los contenidos noticiosos y todo aquello que haga más promisorio lo cotidiano en cada ciudadano colombiano. Este compromiso debe ser asumido institucionalmente por las Universidades, responsables de la educación de cientos de jóvenes en materia de Comunicación Social, paradójicamente en un momento en que el escepticismo hacia los medios masivos de comunicación es cada vez más preocupante, dada la aparente desestimación de los diversos sectores involucrados; por un lado, las empresas informativas, consideradas como reproductoras e incluso causantes de una violencia social desbordada, y de otro, las Facultades, centros de formación de dudoso nivel académico en algunos casos y en otros, alejadas de la realidad. Son formas de apreciar la crisis de lo comunicacional. Crisis no sólo en el campo de su formación sino también de su práctica profesional, centrada sobre todo en una aparente deslegitimidad social; no tanto por la carencia de perspectivas teóricas en el campo académico, que por el contrario son numerosas, o al uso de la mejor tecnología en comunicaciones que hace del oficio periodístico colombiano uno de los más eficaces y reconocidos en el continente; sino más bien por la eventual ruptura que la comunidad percibe de lo que es pensar y hacer la comunicación, dentro de un entorno cultural particular, que se convierte en su autorreferente más obligado. Es algo así como el redescubrimiento de nuestras propias estructuras bajo nuevos procesos de información que alimenten las carencias que padece la sociedad.1 1. El concepto de crisis se entiende aquí como un estado de cosas que en el marco de un proceso deben cambiar. Aunque impredecible su resultado, no es catastrófico ni contingente. Contradicciones en el estado de bienestar. Offe, Claus; Alianza Universidad, 1988, Pág. 44 Comunicarse sin perspectivas, ¿para qué? Palabra Clave 81 Número 4 · 2001 En medio de las grandes tensiones de comunidades como la nuestra, cuando por fuerza de las circunstancias, se ha dejado de lado el saber especulativo en reflexiones teóricas para dar paso a otras consideraciones quizás más urgidas y protagónicas, aparece entre otras, lo comunicacional desligado de unos hechos, que se convierten a su vez en carentes de perspectiva y comprensión como resultado de la ausencia de soportes teóricos y fundamentos tomados de la propia realidad. Es la crisis de la comunicación de la que se habla desde hace algunos años entre los círculos académicos y profesionales del país, en una época coyuntural, al final y comienzo de un siglo, condición que convierte a la comunicación en la figura emblemática de las sociedades del tercer milenio.2 EL REGRESO DE LO COTIDIANO Durante algún tiempo se ha entendido lo comunicacional, como un asunto que gira en torno a tres pilares cardinales a manera de vértices del mismo triángulo y que interactúan en el espacio social según dinámicas de colaboración, complementariedad o conflicto con resultados diferentes según el caso: hombre, sistema cultural y medios de comunicación como tal.3 Con algunos enfoques en la relevancia pública, este modelo varía aunque la triada inicial se mantenga. Una ecuación simple y muy explicativa, que con el tiempo ha perdido vigor y relevancia frente a los nuevos escenarios. Hoy se puede considerar más pertinente hablar de una interrelación entre hombre, sistema cultural comunicante (no comunicado para evitar su reduccionismo tecnológico) y realidades mediatizadas, como elementos en juego bajo una figura ya no triangular sino lineal, que rompe el esquema anterior. Esta nueva visión da paso a una ecuación en donde prima el hombre como persona con sus particularidades, luego a una sociedad que lo legitima y se legitima a través de lo que comunica, para entrar a entender las nuevas realidades sociales mediatizadas, que 2. Historia de las Teorías de la Comunicación. Mattelart A; Mattelart M; Paidós Comunicación, 1997, Introducción. 3. Crítica de la seducción mediática. Sánchez Noriega, José Luis; Editorial Tecnos, 1997, Pág. 49 GERMÁN ORTIZ LEIVA Palabra Clave 82 Número 4 · 2001 saltan de esa comunidad en distintas direcciones y que por tanto deben ser leídas como partes independientes, pero siempre en estrecha relación con el efecto comunicacional sobre la sociedad, pero ante todo sobre el hombre. Es un cambio semejante al ocurrido hace un par de décadas cuando en medio de un debate académico se cuestionó la utilidad de los estudios puramente funcionales y sistémicos en el terreno de lo sociológico estructural, al comprender que la sociedad por sí misma no explica lo comunicacional ni mucho menos las acciones que esto conlleva al interior de grupos sociales o comunidades. Por contrario, se reconoció en lo interpretativo la relevancia de los individuos (sociología interpretativa) y el papel de la persona frente al grupo; en otras palabras, el grado de autonomía de ciertas audiencias frente a los dispositivos de la comunicación de masas, de una sociedad más interesada en comunicarse para reconocerse y valerse a sí misma, que aquella centrada en lo escuetamente masificado. Se trata de una sociedad que entiende que las relaciones generadas entre sus acciones y los contextos en los que ocurren, permeabiliza y deja entrever a su vez otras estructuras de esa realidad denominada comunicativa, es decir, que el proceso de entender la complejidad de la convivencia humana, significa privilegiar en el análisis de los problemas sociales, la perspectiva comunicativa, desde la cual se puede evaluar y relativizar en cada caso la componente estratégica, tanto desde el punto de vista del conflicto, como de las posibles soluciones; esto implica que en una respuesta a los conflictos debe primar la reconstrucción de la acción comunicativa...4 COMUNICAR PARA LA PAZ: UN RETO DE TODOS LOS DÍAS En el caso colombiano, desde esta perspectiva comunicacional, son muchas las tareas por hacer y las oportunidades para evaluar nuestra realidad. Por ejemplo, para los periodistas que cubren el conflicto armado, las situaciones limitantes son más determinantes en la calidad 4. Hoyos Vásquez, Guillermo: Op. Cit, Pág. 1 Comunicarse sin perspectivas, ¿para qué? Palabra Clave 83 Número 4 · 2001 informativa que el compromiso de mantener en términos de equilibrio la verdad y la objetividad de la información. Un impedimento que afecta su perspectiva lo constituye el hecho de que la descripción de la realidad del conflicto, es en la mayoría de los casos, producto de los datos ofrecidos por las fuentes "oficiales". Todo dependerá en últimas de quiénes ostenten el poder para conseguir un lugar en la noticia y por ende su espacio en los medios, sean órganos del Estado, grupos económicos o políticos, facciones armadas o sectores sociales interesados. Los medios de comunicación entonces entran en una especie de vaivén informativo, en donde prima la capacidad de quienes puedan presentarse como fuente válida para el reportero, o por la vía de acciones que ameriten una nota periodística lo suficientemente impactante como para abrir la emisión de la noche. En este punto el debate es más de fondo. De lo que se trata es resolver cómo se obtiene la información y quiénes son los voceros de la guerra en Colombia. Es claro que en el ámbito de una violencia generalizada y mutante, son múltiples las formas de guerras internas, la reconfiguración de los distintos actores y componentes del conflicto son la nota predominante y el acceso a la verdad una utopía. Conocer lo que realmente sucedió, resulta más de los murmullos de una ciudadanía que a diario recibe una oleada de informaciones, que si bien divulgan la gravedad del hecho, ocultan su trascendencia. El efecto bien se puede explicar con la palabras de un pensador francés: sensación o percepción caleidoscópica, cargada de dificultades para aprender, analizar, comprender, y construir salidas al conflicto. Precisamente uno de los aspectos más preocupantes de la crisis colombiana es la carencia de perspectivas políticas. Esto contribuye tanto a la desorientación de la opinión pública como al bloqueo del proceso de negociación. Sin una afirmación clara de los objetivos y los medios políticos a corto y mediano plazo que inspiren la acción del gobierno, el proceso de desinstitucionalización no puede sino agravarse.5 5. Llamado por Colombia emitido por los participantes en el Encuentro Internacional convocado por el Comité Universitario Francés por Colombia. París, 27 y 28 de noviembre de 2000; Pág. 2 GERMÁN ORTIZ LEIVA Palabra Clave 84 Número 4 · 2001 En un momento como el que vive hoy el país, con uno de los índices más altos de violencia ciudadana sobre el planeta,6 el papel de los medios de comunicación como morigeradores o exacerbadores de los estados de ánimo, es fundamental. Por eso es necesario que los directores de medios y reporteros, tengan criterios claros y profesionales sobre las transmisiones en directo, en particular las relacionadas con orden público, porque el tremendismo que puede desatar la propia naturaleza de los hechos, origina mayor desconcierto y confusión en una opinión vulnerable a las acciones violentas y a la incapacidad del Estado para contenerlas.7 GOBERNABILIDAD Y AGENDA PÚBLICA Aunque no es el objeto principal de este ensayo tratar el asunto de la gobernabilidad y la incidencia que tiene en ella la función de los medios masivos de comunicación, por las razones antes expuestas, es necesario resaltar la relación directa entre las decisiones comunes de los gobernantes de turno al interior de un Estado y la construcción del escenario apropiado para la ejecución y legitimidad de las mismas. No en vano asistimos a un espacio de lo público que hoy padece una realidad distinta: su notoriedad mediática, en donde lo comunicacional es razón fundamental para entender la tarea política del hacer en medio de la lógica informativa y el compromiso social de los medios. El periodismo legitima las acciones sociales de las comunidades con las que se interrelaciona, en forma independiente frente a la naturaleza de los asuntos que trate. Hasta hace unas décadas a los medios masivos de comunicación se les reconocía un papel exclusivamente intermediador entre realidad y comunidad. Sin embargo, y con el avance de las diversas investigaciones sobre fenómenos de masas, ese papel se ha desplazado hasta el punto de darle a los mismos, una tarea a manera de pivote social, porque son ellos quienes ahora actúan en el marco del sistema completo, como reguladores 6. Desde hace veinte años Colombia conoce fenómenos de violencia agudos y complejos. Durante los últimos diez años se han registrado más de 250.0000 muertes violentas y la tasa anual de homicidios ha sido de 70 por cada 100.000 habitantes. Lair, Eric; El terror, recurso estratégico de los actores armados. Análisis Político No. 37; 1999, Págs. 64 7. Colombia: violencia y democracia. Informe presentado al Ministerio de Gobierno. UN - Colciencias 1988; Pág. 137 Comunicarse sin perspectivas, ¿para qué? Palabra Clave 85 Número 4 · 2001 de y entre la autoridad política, la sociedad con todas sus agremiaciones Y el mercado de lógica capitalista. Se piensa en una esfera pública ( integrada por los medios de comunicación y su lógica interna) por encima de la conjunción de influencias recíprocas entre el resto de la comunidad, donde dicha esfera permite su interrelación haciendo visibles (u ocultando) a los diversos agentes e instituciones sociales. Pero la esfera pública hace algo más que mediar: al ser parte de ella los demás círculos, puede erigirse como su representante. La esfera pública puede de esta manera reemplazarlos y llegar a ser, bien es verdad que no siempre, una esfera autónoma capaz de soslayar al resto de la sociedad civil.8 Si a comienzos de los años ochenta en Europa se inician los estudios de gobernabilidad para repensar el tamaño y la función del Estado benefactor clásico, y de esta manera mejorar su capacidad de guía y liderazgo al interior de sus sociedades políticas, hoy se hace necesario analizar cómo los Mass Media reproducen y generan espacios de convivencia diferentes, en los que la legitimidad y aceptabilidad de la comunidad sean posibles y quizás necesarias para el buen funcionamiento del régimen y el logro de sus metas comunes con beneficio social. En pocas palabras, cambios y transformaciones del sistema social sólo se pueden dar a través de un flujo claro y sin ruidos de la información, llámese del conocimiento, ó del reconocimiento, que los medios masivos de comunicación social puedan hacer de sí mismos y de la propia comunidad en que se encuentren. El panorama es amplio y retador, necesario y oportuno, para que intelectuales, académicos, y estudiosos de las llamadas ciencias de la comunicación como lo son la Sociología, la Antropología, la Sicología, la Historia, la Política, entre otras, procuren mejores niveles de abstracción en la comprensión de la comunicación como el medio para resolver sus problemas cotidianos, por medio de espacios de concertación, enmarcados en lo funcional - comunicacional como única salida para la 8. Algo más que periodistas. Sociología de una profesión. Ortega Félix; Humanes María Luisa; Editorial Ariel, S.A. Barcelona, 1a. Edición: febrero de 2000; Pág. 53 GERMÁN ORTIZ LEIVA Palabra Clave 86 Número 4 · 2001 reconstrucción del tejido social nacional. Comunicar reconociendo al contrario como un interlocutor válido, concertando a la sociedad en torno a temáticas que rescaten el valor del hombre sobre lo meramente informativo y espectacular. Así se podría resumir la estrategia. Si en términos concretos se quisiera evidenciar ese reconocimiento, se podría afirmar que la comunicación de lo social en medio del conflicto, deberá girar sobre la confianza y la alteridad a manera de ejes temáticos de información diaria. Es además una forma de fortalecer líneas de investigación académica, de un asunto que hasta ahora empieza a ser relevante al interior de la sociedad colombiana. Son más de dos generaciones en guerra. Y las perspectivas socio- políticas de un acuerdo para el conflicto al corto plazo, no son las mejores. Es aquí donde entra a jugar, la trascendental tarea de comunicar con acción social, comunicar con perspectiva. El éxito depende de la validez de lo comunicacional en manos de las empresas informativas y de los comunicadores, en una sociedad en la que precisamente el mundo de lo social se interpreta en función de categorías y de construcciones de sentido común, que constituyen los recursos gracias a los cuales los actores sociales logran una comprensión intersubjetiva y consiguen orientarse unos respecto de los otros.9 Con esto no estaremos inventando nada nuevo. Pero quizás restableceríamos canales que se rompieron hace mucho tiempo en Colombia; canales que como lo anotaba Antanas Mockus, pocos días antes de su reelección para la alcaldía de Bogotá, reivindican la fe y la confianza públicas, para alimentar con mejores ideas a una sociedad civil que debe ejecutar su propio proyecto de país. Pero que hoy se encuentra desorientada y que sólo se puede animar un proceso de mayor desinstitucionalización social. 9. Mattelart A; Mattelart M; Op. Cit. Pág. 92